top of page
  • Writer's pictureMis manos

El 2021 ... Vulnerabilidad.


Esta será una de las entradas mas sinceras que haya escrito en este espacio que tanto amo y cuido, porque lo que está escrito aquí, más que letras, es un pedazo de mí, es mi corazón el lugar donde se guardan las experiencias humanas más significativas, esas que te quiero compartir hoy.



Cerré el 2021 respetando mi vulnerabilidad, desde la incertidumbre de no estar viviendo ninguno los planes hechos para esta fecha, (irónicamente después de 3 años sin viajar a mi país, cuidándome de una pandemia, llego a mis esperadas vacaciones y me abraza el Covid 19) y aprendiendo que tener siempre un plan no es seguridad de algo.


Después de 30 años en mi vida, el 2021 fue el año en que no lamenté ni un solo “NO”, el año en que tanto las derrotas como las victorias fueron necesarias para comprender que no importa lo que pase en el día, lo que tenga que hacer o no, lo que dejé de hacer o no fui capaz, siempre seré suficiente; nada de eso me hará dejar de ser valiosa.


Después de muchas dudas, el 2021 fue el año en donde Dios me recordó que ÉL me ve y ve lo que hago por amor a él y a los demás. Aun desde mi imperfección, imperfección que estoy aprendiendo a conocer desde que decidí alejarme del perfeccionismo, esa gran mentira que buscamos los seres humanos y que solo nos quita tiempo y nos roba la capacidad de disfrutar y desarrollar nuestras aptitudes. Un perfeccionismo disfrazado de “excelencia” pero que en verdad es un escudo que usamos los seres humanos para defendernos de las criticas y del miedo a ser juzgados por cometer errores.


En el 2021 también enterré la idea de que SOY lo que me ha sucedido, convenciéndome de que SOY aquello en lo que día a día elijo convertirme. Soy más que una profesión, un titulo, una idea, un error, una buena calificación o un peso bajo o alto.


Hoy que lees El Lenguaje de mis manos, te invito a comenzar un 2022 siendo comprensivo y amable contigo mismo, a brindarte mas atención, a quitarte la idea de que solo eres amado cuando todo “está bien” y a buscar nuevas formas de SER, tomando el riesgo de sentirte vulnerable (entendiendo que la Vulnerabilidad, como lo explica Brené Brown no es debilidad, es solo la experiencia de conocer los triunfos y los fracasos y darnos cuenta de la necesidad de ambas) solo atreviéndonos y arriesgándonos llegaremos a tener esa autoestima sana y fuerte que tanto deseamos.


¡Que el 2022 te enseñe cuan valioso y capaz eres!


¡Que sea el año en donde aprendamos a ser agradecidos, porque solo viviendo en gratitud seremos dichosos!


41 views0 comments

Recent Posts

See All
bottom of page